Los fracasos del Foro Económico Mundial.
Una organización que ha dado que hablar en estos dos años es, pues, el Foro Económico Mundial o Word Economic Forum (WEF con sus siglas en inglés). Pues ese club exclusivo estuvo detrás de la plandemia, no para curar a la humanidad de un virus inexistente, sino para tener control.
El cabecilla es el economista Klaus Shwab, quien creó en esta organización basándose en la escuela de verano que tenía Henry Kissinger en la universidad de Harvard. La idea es infiltrarse en los gobiernos.
El gobernador del Estado de Florida, Ron DeSantis dijo: “Rechazamos a las élites y ahora estamos tratando de reescribir la historia, actuando como si hubieran querido a los niños en las escuelas. Y debemos dejar que se salgan con la suya. Pero también debemos señalar, que no sólo se equivocaron con las escuelas, las élites también se equivocaron con los confinamientos, se equivocaron con los modelos epidemiológicos y los modelos de hospitalización. Se equivocaron con el enmascaramiento forzado. Se equivocaron al rechazar la existencia de la inmunidad natural. Se equivocaron con la eficacia de las ‘vacunas’ ARNm. Y se equivocaron cuando dije que covid era estacional. Y ahora lo admiten, pero no lo hicieron cuando era evidente que sí. Así que en casi todos los temas importantes, estas élites que aparecían en las noticias por cable, o estaban donde fuera, se equivocaba y lo hacían una y otra vez. Y por eso también servimos en Florida como barrera para lo que creo que se habrían impuesto en este país si no fuera por nuestro liderazgo. Y eso es un estado de seguridad biomédica. Si se fijan en lo que intentaban hacer con la imposición de la ‘vacuna’ y los pasaportes y todas estas cosas diferentes, este país tendría un aspecto muy diferente ahora mismo si…”.
Las palabras del político norteamericano muestran el estrepitoso fracaso de la élite que planifico esta falsa pandemia. Y como consecuencia de la paralización del 2020 se generó una crisis económica sin precedentes. La crises energética la provocaron ellos para así dar inició al Gran Reinicio. Sin embargo, la élite no le interesa reconocer que se equivocaron.
Primer fracaso: Las vacunas.
¿Cuál fue el propósito de vacunar al 80% de la población mundial? Ellos querían el 100%. Según el medio inglés “Daily Mail”, Klaus Schwab manifestó que habría “antes del 2024 se producirá un cambio demográfico masivo”. El artículo escrito por dos periodistas fue borrado de ese medio digital.
Como la verdad siempre sale a la luz, muchas personas importantes obtuvieron certificados falsos de vacunación, entre ellos, deportistas, políticos y empresarios que llamaban a vacunarse. Los tecnócratas ni siquiera se enfocaron en los enfermos.
Se puede concluir que la vacunación masiva ha sido desastre de proporciones bíblicas, pues durante el 2021 fallecieron el doble de fallecidos que en el 2020. Ahí está la obra del señor William Gates y del WEF. A lo anterior, aumento de ataques cardíacos en personas menores de 50 año, trombosis, cáncer, etc. La única persona “que aparecía en las noticias por cable” es el creador de Microsoft. Sin embargo, no ha dicho nada al respecto, pues a los demás los gigantes de la tecnología, ya sea cerraban canales de Youtube, o cierran o suspenden cuentas como en twitter.
Según el Sistema de Informes de Eventos Adversos a las vacunas (VAERS), el cáncer aumento 338% entre 2021 y 2022.
Una enfermera del gran hospital de Barcelona dice: “La tercera dosis ha sido letal. El cáncer ha crecido un 5000%”. Añade que “donde ejerzo de sanitaria, el 98% de los ingresos actuales, son vacunados”.
El médico Petrosebiche Bellikof muestra en su cuenta twitter que, según la Base de Datos Médicos Epidemiológicos (DMED) del Departamento de Defensa de los Estados Unidos, los efectos detectados en las vacunas ARNm son: 279% de aumentos de abortos espontáneos, 487% aumento de cáncer de mamá, 1048% aumento en afecciones al sistema nervioso, 468% de aumento en embolias pulmonares, 302% aumento de taquicardia, 452% aumento de migrañas,, 471% aumento de infertilidad femenina, 55% aumentos de defectos al nacer, 350% aumento de la infertilidad masculina,, 369% de aumento de cáncer testicular, 2181% aumento de hipertensión, 664% aumento de neoplasmas malignos, 680% aumento en esclerosis múltiples y 551% aumento en Síndrome de Guillain-Barré.
El señor Gates reprobó el examen. Si alguien todavía pensaba que eran cuentos sus acciones en África y la India, ahora no hay duda que las pócimas del millonario hacen daño. Hay un video en el cual millonario se pavonea de haber presionado al ex presidente Donald Trump para poner las vacunas ARNm sabiendo que dañaban. Otro ejemplo, que no le interesa la salud, es que él sabía que covid-19 afectaba a quienes tenían enfermedades preexistentes. Aun así, siguió con la vacunación, pues como manifestó “mi mejor inversión que he realizado”.
Ahora con el destape del fraude realizado por el laboratorio Pfizer, el desprestigio de Gates se va ir por los suelos, ya que defendió reiterada veces que los pinchazos detenía la transmisión.
Según un medio, 782.900 buscan atención médica tras vacuna covid-19 en los Estados Unidos. William Gates no dice nada.
Nada de lo que hace el Foro Económico Mundial se basa en la ciencia. La vacunación masiva fue una etapa de un proceso más grande.
“El COVID-19 fue la prueba de responsabilidad social: miles de millones de ciudadanos de todo el mundo adoptaron una gran cantidad de restricciones inimaginables para la salud pública. Hubo numerosos ejemplos de nivel mundial de mantenimiento social, uso de máscaras, vacunación masiva y aceptación de aplicaciones de rastreo de contactos para la salud pública, lo que demostró el núcleo de la responsabilidad social individual”.
Tanto de Gates como de Schwab no dicen nada al respecto. No hay ninguna evaluación.
Segundo fracaso: El confinamiento.
Un titular de un medio digital pone el siguiente titular: “Los medios descubrieron que el confinamiento es peor que Covid…pero ¿por qué?”. Científicos ingleses que asesoraron al gobierno se arrepintieron por haber recomendado los encierros.
Un daño colateral del confinamiento en los niños es el aprendizaje. Los superhombres del Foro Económico Mundial no han dicho nada. En efecto, “The New York Times” dice lo siguiente: “La pandemia borró dos décadas de progreso en matemáticas y lectura”. Después agrega: “Los resultados de una prueba nacional mostraron cuán devastadores ha sido los últimos dos años para los escolares de 9 años, especialmente para los más vulnerables”. Es a nivel mundial.
En nuestro país, “El Mercurio de Santiago” puso en primera plana la misma conclusión. Como consecuencia del aislamiento concluyen que los niños de más escasos recursos no diferencian colores. Además, dice el titular “Niños más vulnerables muestran notorio retraso en habilidades motoras y de lenguaje por la pandemia”. A continuación basándose en los estudios de la Fundación Familias Power señala que les cuesta interactuar con adultos. Había escuchado que los niños sentían terror ante un desconocido, pero que es un familiar. Finalmente, dicen que los niños de 2° básico comienzan el año sin saber leer.
Como consecuencia de lo anterior, la teleeducación para niños y estudiantes fue un desastre.
Klaus Schwab en vez elogiar a los países que no hicieron cuarentena, o mejor dicho que no paralizaron las actividades económicas prefiere adular a China; aunque éste país haya falsificado los reportes principios del 2020. En el mismo sentido, creador de Microsoft propuso seguir el camino de Australia. En el país de los canguro en el 2021, los no vacunados estaban en campos de concentración. Y en junio de este año propuso a Chino con su equipo de reacción inmediata. Eso lo dijo cuando en Shanghai sacrificaban a las mascotas. La idea es volver a encerrar a la humanidad.
En la misma línea, el nazi Klaus Schwab en su libro proponía encerrar a las personas por el fraude del cambio climático.
Tercer fracaso: Autos eléctricos.
En Europa, a partir del 2025 quieren prohibir los automóviles que usan gasolina. Sin embargo, la élite cuando hacen sus reuniones, ya sea por el cambio climático, ya se las reuniones en Davos llegan con autos que consumen bastante combustibles o en sus jet privados. Los Tesla son un fraude. Basta ver los videos que circulan por las redes sociales. Se demoran un siglo en cargarse, hay que volverlos carga a cada rato. Se incendian fácilmente. Para apagar el fuego se gastan varios galones de agua, cosa que no sucede con los autos a gasolina. En caso de accidente, los socorristas tienen que ponerse un traje para no electrocutarse. Por último, la recarga sale más caros que los autos que emplean los derivados del petróleo. Los autos Tesla son chatarra.
Cuarto fracaso: Comer insectos.
El FEM dentro de su programa de desarrollo sustentable quieren que los seres humanos comamos insectos, gusanos y larvas, porque su producción emite poca huella de carbono. Sin embargo, los insectos son incompatibles con el sistema digestivo del humano, ya que únicamente, las aves los pueden digerir. Además, tienen quitina que no puede ser procesada por nuestro intestino. La quitina es un polisacárido que es muy apetecible para el cáncer, los parásitos, hongos. Todo lo que produce enfermedades. Asimismo, contiene esteroides metamórficos, en particular la ecdisterona. Los mamíferos no pueden comer insectos. Con todo, están desafortunadamente adoctrinando a los niños en varios países como Australia, Holanda y Gran Bretaña.
La periodista holandesa Eva Vlaardingerbroek escribe el siguiente tweet: “Agenda WEF en plena vigencia: Cientos de niños de los Países Bajos han comenzado una campaña a los niños de 10 a 12 años a los gusanos de harina y los insectos como sustitutos de la carne ‘sostenible’. El objetivo es lograr “cambios de comportamiento a través de niños sin prejuicio””. O sea, ingeniería social.
Nuestro país no se queda atrás, pues los grupos Ibañez, Luksic y Angelini lanzaron un emprendimiento para crear una proteína en base a mosca.
Quinto fracaso: Sri Lanka.
Ese país tuvo una crisis alimentaria porque siguió la receta del Foro Económico Mundial. ¿Cuál era la receta? El año pasado eliminaron los fertilizantes de la agricultura para seguir la agenda verde y sustentable. Eso condujo a la escasez de alimentos. Además, fue la primera vez que tuvieron escasez de alimento, electricidad Fue tanta la rabia de los habitantes de ese país que se entraron al palacio del gobierno. Mientras el Primer Ministro Ranil Wickremesinghe huyo en barco.
El FEM había puesto en su página del 2018: “Cómo enriquecemos a Sri Lanka para 2025: no es ningún secreto que Asia es el futuro «motor económico», y en nuestros esfuerzos por hacer de Sri Lanka un país rico para 2025, nuestra intención es…”.
Al saberse esa noticia, el FEM borró de su sitio el artículo del Primer Ministro “Así es como enriqueceré a mi país para 2025”.
En la historia de la humanidad nunca ha habido un grupo de seres de escasa o nula inteligencia como los que se reúnen anualmente en el Foro de Davos. Si no consideran como retrasado mental a Bill Gates, me imagino cómo será el resto de los CEO, investigadores de universidad, algún gurú, hombres religiosos, banqueros y mega millonarios. El FEM es la expresión del irracionalismo moderno.
Todo lo que provenga del Foro Económico Mundial es nefasto para la humanidad.
Javier Bazán